La Justicia e Injusticia del TPS
Las generaciones de hoy, que vivimos en EUA, estamos viendo un fenómeno social, que es la inmigración visible, la que viene del sur, caminando, desde muchas millas de distancia, desde el sur, pasando por varios países y corriendo todos los riesgos a su paso, trayendo mujeres, niños, jóvenes, personas mayores.
No es la primera vez que llegan miles y millones a EU en la historia. Nos parece nuevo porque no lo habíamos presenciado antes, pero aquí hay algunos datos históricos de la inmigración.
Basta con ver la información que aparece en Wikipedia, aunque no sea del todo exacta o comprobada, es una buena referencia de información.
Entre 1850 a 1930 (80 años) cerca de 5 millones de alemanes migraron a USA, igual que cerca de 3.5 millones de ingleses y 4.5 millones de irlandeses.
Menciona el texto que cerca de 25 millones de europeos migraron a EUA, siendo originarios de Grecia, Italia, Hungría, Polonia y slovacos. Todos ellos huyendo de guerras o miseria y falta de oportunidad en sus países, aunado a la demanda de fuerza laboral en Estados Unidos, por el crecimiendo de la agricultura, el desarrollo de los ferrocarriles y la posterior industria.
Igual se menciona de la emigración proveniente de los franceses canadienses.
Al igual que hoy, sectores sociales y políticos se mostraron reacios a la inmigración y se fomentaron odios hacia los foráneos y se establecieron leyes regulando la inmigración ilegal. Y así a lo largo de la historia, han venido asiáticos, árabes, africanos, japoneses y de todas partes del mundo y los gobiernos han tenido que intervenir para regular la inmigración ilegal y al mismo tiempo han tenido que ir cambiando las leyes y adoptando nuevas de acuerdo a las necesidades.
Hoy estamos siendo testigos de la inmigración del sur, y habrá personas que se consideran ofendidas, otros con temores, otros con prejuicios y otros con empatía hacia los extranjeros.
Vemos como los gobiernos actuales han tenido que ir tomando medidas en contra y a favor; han tenido que formar nuevos presupuestos para atender las necesidades de los recién llegados y vemos como entre los políticos, cada uno toma diferente posición buscando ganar adeptos para las próximas elecciones.
Todo esto, sin tomar en cuenta la inmigración silenciosa, que sigue viniendo de todas partes del mundo, aprovechando una visa de turismo, de estudiante, de trabajo, etc. y que al final deciden permanecer en el país, sin que esos números aparezcan en los periódicos y noticieros.
Acaba de anunciar el gobierno federal, que otorgará un tratado de protección temporal a 500 mil ciudadanos venezolanos para poder otorgarles una estadía legal temporal, un permiso de trabajo y un seguro social que les brindará seguridad al menos por dos años pensando erróneamente que en ese tiempo ya las cosas han mejorado en el sur y las personas regresarán contentas. Aunque tambien saben que solamente ganan un tiempo mientras unos buscan y otros evaden la forma de solucionarlo.
Son medidas que el gobierno debe tomar ante la presión social y política y por supuesto, también para poder ganar adeptos para su partido. La immigración pasa a ser entonces de ser un problema social, a un problema político y mientras cada quien toma ventaja de la situación.
Aunque según las encuestas publicadas, respecto a los intereses del electorado, en apariencia la inmigración no es un tema preocupante; si va a ser un tema recurrente en la próxima campaña presidencial y cada partido querrá aprovechar la coyuntura y al final tendrán que buscar soluciones en conjunto que puedan beneficiar a los grandes intereses capitalistas.
Por otro lado, existen mas de 15 millones de personas que han venido desde hace mas de 35 años, callados, en silencio, en pequeños grupos, que han sido recibidos por amigos y familiares. Se han ido integrando a la economía, han crecido, tenido hijos, puesto negocios, han creado puestos de trabajo, han creado riqueza, han pagado impuestos y han mostrado responsabilidad y respeto a la comunidad y al país.
Estos son los olvidados del momento. Ellos no pudieron pedir asilo, aunque hayan venido huyendo por cualquier motivo. Ellos no han podido comparecer ante un juez para pedir una audiencia. Ello non han recibido apoyo del gobierno, sino solamente de sus familiares, durante unos pocos días y ya luego han tenido que ingeniárselas para proveer a su propio sustento y enviar dinero a la familia que quedó en sus países de origen.
Muchos de ellos tienen niños que ahora les llaman ¨dreamers¨ y solo contemplan como los recién llegados podrán tener documentos para poder trabajar, sin que hayan aportado nada al país, mientras ellos que han demostrado su capacidad y han contribuido a la economía del país, siguen esperando que se cumplan las promesas que cada 4 años hacen los políticos.
Que sean bienvenidos los nuevos inmigrantes. Que puedan rápidamente integrarse a esta nueva cultura. Que aporten su trabajo, experiencia y conocimiento a esta economía. Que puedan proveer para su familia y puedan ayudar a los suyos, en su país de origen, igual que muchos otros que tienen años esperando la oportunidad de salir de las sombras.